Cada persona debe tener un tratamiento personalizado.
Pída una cita y estudiaremos su caso de forma individual con una consulta de 60 minutos en la que analizaremos a fondo qué hacer juntos.
La relación entre peso y altura es un indicativo de la obesidad, pero no el único. Enfermedades asociadas, situación personal, profesional, anímica… muchos factores influyen a la hora de decidir afrontar soluciones diversas.
Cada cuerpo es único y de cada persona.
Es necesario un análisis específico de cada caso.
A continuación respondemos a las preguntas frecuentes sobre la cirugía bariátrica:
¿Cuándo debo someterme a una operación de Obesidad Mórbida?
En situaciones especiales se intervienen pacientes con IMC entre 32 y 35. Consulte su caso contactando con nosotros.
En todo caso, las indicaciones absolutas son:
Cuando existe un Índice de Masa Corporal (IMC) superior a 40 Kg/ m2, o un IMC superior a 35 Kg / m2 acompañado de comorbilidades.
Cuando se llega a estos índices, está demostrado que los tratamientos conservadores tanto dietéticos como los farmacológicos, son insuficientes, pues en muchas ocasiones se produce un descenso de peso pero con reganancia posterior mayor al dejarlos (efecto “yoyo”).
¿Por qué someterme a una operación de Obesidad?
Debo operarme porque el riesgo de sufrir o agravar mis enfermedades, incluida la muerte, es mucho mayor que el de la propia intervención.
La cirugía es el método más eficaz demostrado hasta el momento para curar mi obesidad.
La cirugía de la obesidad permite conseguir un descenso del peso y que éste se mantenga a lo largo del seguimiento posterior a la intervención.
¿Existe la operación de obesidad ideal?
Existen diferentes técnicas o procedimientos quirúrgicos para el tratamiento de la obesidad.
La operación ideal será aquella que cumpla una serie de condiciones como:
- Pérdida de exceso de peso superior al 50%
- Pérdida de peso mantenida más de 5 años
- Que beneficie al menos al 75% de los pacientes intervenidos
- Que aporte una buena calidad de vida y de alimentación
- Que no condicione complicaciones a largo plazo
- Que no presente más de 2% de reoperaciones al año en relación a la técnica empleada
- Con morbilidad inferior a 10% y mortalidad inferior a 1%
La elección de la técnica depende de las características de cada paciente. No obstante, la más utilizada el bypass gástrico.
También estamos capacitados en la técnica pionera Sleeve, o una de sus variantes, la técnica de cruce duodenal.
¿Qué beneficios obtengo al someterme a una operación de obesidad mórbida?
Todos los beneficios son derivados del adelgazamiento.
Físicos
La pérdida de peso conlleva cambios del metabolismo que proporcionaran una mejoría o cura de las comorbilidades como la diabetes, la hipertensión arterial, el colesterol elevado, el síndrome de apnea del sueño
Y también muchos problemas respiratorios, los dolores articulares, trastornos hormonales, infertilidad, etc.
Todo ello supone una mejoría importante en su calidad de vida, que se extenderá a todas las facetas (familiar y de relación, trabajo, social, sexual, etc). Sus limitaciones de movilidad y relación desaparecerán.
Psicológicos
Dejará de sentirse observado, dejará de oír comentarios sobre su obesidad. Ya no tendrá que tener en cuenta dónde o cómo se sienta, ni en que lugares o establecimientos puede estar cómodamente o va ser bien acogido.
Podrá ir al cine y sentarse sin aprietos en una butaca.
Podrá viajar sin problemas en transporte público (avión, tren, etc), donde el tamaño del asiento dejará de ser un problema.
Estéticos
A pesar de que el objetivo principal de la cirugía de la obesidad es mejorar la salud y con ello la supervivencia, el adelgazamiento le va a proporcionar también ciertas condiciones estéticas que pueden ser interesantes, aunque precise, según cada paciente, alguna cirugía para remodelar su piel.
¿Cómo es el proceso de una operación de obesidad mórbida?
Previamente a la operación de obesidad
El paciente es evaluado previamente en consulta, realizando una historia clínica detallada, así como una exploración minuciosa con peso, talla e Índice de Masa Cormporal (IMC). En determinados casos se añade un estudio de holter metabólico.
Al paciente se le explica con claridad el procedimiento, riesgos y sus posibles complicaciones (está descrita en la literatura una mortalidad inferior al 1%), tras lo cual debe firmar un consentimiento informado.
La Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad y de las Enfermedes Metabólicas (SECO) anima a evolucionar este concepto pasivo hacia un contrato médico-paciente que incluya el compromiso de seguimiento indefinido, controles establecidos y modificación de hábitos de vida.
Preoperatorio de una cirugía bariátrica
Día 0. Si el paciente tiene indicación de cirugía, se solicita un preoperatorio completo en el que se incluye: analítica, radiografía de tórax, electrocardiograma, consultas de anestesia, hematología y neumología, pruebas de función respiratoria, gastroscopia y ecografía abdominal.
Se ingresa en la clínica el mismo día de la intervención. Es conveniente que los días anteriores se realice una dieta liquida.
Postoperatorio de una cirugía bariátrica
Día 1. Después de la intervención quirúrgica, el paciente pasa las primeras 24 horas controlado en la UCI (nosotros creemos que en esta cirugía, y por las propias características del paciente, es aconsejable esta medida, aunque sabemos que hay cirujanos que no lo creen necesario), para luego pasar a la planta de hospitalización.
Día 2. Después de un control radiológico, a las 48 horas de la intervención quirúrgica se comienza con tolerancia oral progresiva según un estricto protocolo.
Día 4/5. El paciente es dado de alta, todo ello supervisado bajo supervisión de los cirujanos de obesidadfuera / Vigolap.
Posteriormente, se sigue un control riguroso en la consulta externa:
- 7-8 días. 1ª Revisión. Se retiran las grapas de las incisiones de los trocares, se evalúa la tolerancia para su progresión.
- 14 días. 2ª Revisión.
- 30 días. 3ª Revisión, que incluye analítica de control.
- Mes 2 a 6. Controles mensuales
- Desde mes 7. Se recomienda revisión anual (se realizan los controles analíticos necesarios).
En todo caso, cada paciente es único y su control es individual.
¿Cuáles son los cuidados después de una cirugía bariátrica?
Alimentación después de la cirugía bariátrica
Se inicia la dieta con líquidos, que se van aumentando en consistencia y textura a lo largo de los días en función de la tolerancia del paciente.
Posteriormente, se añaden purés o alimentos pasados por turmix.
También se pueden utilizar alimentos ya preparados, específicos para esta fase y que incluso en ocasiones pueden completar o sustituir alguna comida.
Lo habitual es que a lo largo del primer mes la tolerancia aumente progresivamente, sin olvidar que una de las características que persigue la cirugía bariátrica, es la restricción, por eso las cantidades de la ingesta serán menores aunque suficientes para llevar una vida normal.
Dieta después de una cirugía bariátrica
En ocasiones se puede tener intolerancia a determinados alimentos y vomitar.
Cada paciente debe «aprender de nuevo» a comer y reconocer qué comida es la que le sienta peor (esto pasa sobre todo con la carne).
Hay que masticar despacio y preparar el alimento de la forma más adecuada (así, si no se tolera la carne o el pollo en filete, se puede tomar picada o añadida a una crema de verduras).
Tras la cirugía, es habitual que disminuya el apetíto y la sensación de hambre.
Con el paso de los meses la dieta se irá normalizando.
El paciente va poco a poco adaptándose a su nueva situación. Lo ideal sería llegar a una dieta lo más parecida a la normalidad (adecuada en proteínas, hidratos de carbono, vitaminas y escapar a las grasas), con la lógica de cantidades menores y con los cuidados básicos de todo paciente intervenido de cirugía bariátrica.
Hay que evitar las bebidas con gas, masticar chicle, así como dulces y alimentos hipercalóricos como chocolate, batídos, frutos secos, helados etc.
Suplementos tras la cirugía bariátrica
Se aconseja en el primer mes realizar un complemento a la dieta con un concentrado de proteínas que completará la carencia de ellas en esta fase.
Además suele ser habitual el tratamiento con hierro, un protector gástrico y un complejo vitamínico.
También y en relación al peso se aconseja continuar la pauta de una inyección subcutanea de heparina durante dos o tres semanas a partir de la intervención.
En relación a los controles analíticos que se van realizando en el seguimiento, se valora la necesidad de otros tratamientos (calcio, vitamina D, etc).
¿Cuándo podré volver a trabajar tras la operación de cirugía bariátrica?
La mayoría de los pacientes pueden volver a trabajar a los quince días después de la cirugía laparoscópica, aunque esto dependerá del tipo de trabajo que realice cada uno.
Cuando la intervención es por vía abierta, la recuperación es más tardía, reanudando la actividad física normal al mes o mes y medio de la intervención.
¿Cuánto peso puedo perder y a qué ritmo?
Usted va a perder mucho peso, pero poco a poco, a lo largo de 1 año y medio o dos años. No debe tener prisa. No se precipite en querer adelgazar todo el sobrepeso rápidamente, esto no sería bueno para su salud.
Experimentará un mayor descenso de peso en los primeros meses, y posteriormente cada vez menos. Los seis primeros meses perderá peso rápidamente, el segundo semestre perderá peso lentamente, y el tercer semestre muy lentamente.
Al final podrá perder más del 75% de su sobrepeso. Incluso puede perder todo su sobrepeso, llegando a alcanzar su peso ideal.
¿Quién debe realizar la cirugía bariátrica?
Según la Federación Internacional de Cirugía de la Obesidad (IFSO), reunida en Cancún en 1997, se recomienda con firmeza que antes de realizar operaciones primarias de forma independiente, todo cirujano cubra los siguientes estándares mínimos:
- Estar totalmente entrenado y cualificado como cirujano general/gastrointestinal y haber terminado un programa reconocido de cirugía general/gastrointestinal.
- Haber finalizado un programa supervisado en todos los aspectos de la cirugía bariátrica que incluya la educación al paciente, grupos de soporte, técnicas operatorias y cuidados postoperatorios con un cirujano bariátrico designado por IFSO, o una Sociedad Nacional reconocida de cirugía de la obesidad, o un cirujano que haya realizado al menos 200 operaciones bariátricas y tenga cinco o más años de experiencia en el campo de la cirugía de la obesidad.
- Tener una carta escrita de su preceptor de sus satisfactorias habilidades en cirugía bariátrica.
- Estar bien informado y al día en sus conocimientos bariátricos y la literatura de la obesidad como los contenidos en la revista “Obesity Surgery”.
- Ser miembro, o haberlo solicitado, de IFSO o de una Sociedad Nacional reconocida.
- Haber asistido al menos a un Congreso de IFSO o a una Reunión Nacional o a uno de sus cursos.
- Estar firmemente comprometido a dar la información y educación necesarias, y al seguimiento de por vida de sus pacientes bariátricos.
- Realizar la cirugía en instituciones donde haga todo esfuerzo razonable para obtener el equipo, instalaciones y sistemas de soporte para el confort, seguridad y dignidad de los pacientes bariátricos.
Tanto la Dra. Isabel Otero Martínez como el Dr. Ignacio Maruri Chimeno de VigoLap, cumplen dichos requisitos y están ampliamente capacitados para este tipo de cirugía, con una amplia dedicación tanto a la cirugía laparoscópica como a la obesidad desde hace más de 15 años.
¿Quiere saber más? Escríbanos y le contestamos personalmente.
Aquí podrá contratar una VIDEOCONSULTA ONLINE con los doctores Isabel Otero e Ignacio Maruri, los únicos cirujanos gallegos con la máxima certificación de la sociedad española de Cirugía de la Obesidad (SECO).

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